Tengo amigos que poseen grandes motos, de gran cilindrada, y cariñosamente las llaman "burras". Yo a mi "49", cariñosamente, la llamo "descapotable", suena más sofisticado y glamuroso.
Si no me equivoco este mes cumplo mi "mayoría de edad" como motera. Pero no he dejado de tener miedo, ni aún cuando la distancia no requiera salir a la carretera.
Esta mañana, como cada mañana, camino del trabajo iba pensando que no he tenido más accidentes porque Dios no ha querido y porque practico el exceso de prudencia. Si ello fuese objeto de multa ya tendría unas cuantas.
Aquellos que cruzan sin mirar. los que lo hacen a excasos metros de un paso de peatones y, claro, no los esperas, los que tienen los "intermitentes rotos" o los que piensan que sabes cuándo y dónde van a girar, los que frenan de golpe, los que no saben si a izquierda o a derecha, los que te adelantan porque no quieren ir a tu velocidad, los que apuran cuando se cierra el semáforo, los que parece que siempre llevan la preferencia de paso, los que no soportan una moto delante, los que confian en que sus niños saben que se tienen que parar o los que, por entre dos coches, meten el carrito del bebé "para que este vea si viene alguien", los que abren la puerta sin mirar, los que paran donde quieren, los que buscan aparcamiento, los que no acaban de saber desaparcar, los que van hablando por el movil...... creo que hoy me los he encontrado a todos y si no fuera porque voy con mil ojos cualquiera me podría haber costado un disgusto.
Despues de tres incidentes con mi "descapotable", en los que nunca fui la responsable y que no me costaron la vida evidentemente, creo que mil ojos son pocos dada la temeridad con la que, tanto peatones como conductores, nos conducimos (metámonos todos y sálvese el que pueda). Y lo peor de todo es que cuando estas imprudencias se cometen nunca hay un guardia que lo vea y llame la atención, y si lo hace... normalmente será el de la moto quien se lleve el rapapolvo.
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