jueves, 25 de junio de 2009

Parece mentira...

Parece mentira. Casi un mes sin aparecer por aqui, primero porque me fuí a ver a mi Niña Rocío y después porque mi router no quería funcionar, y no sé por donde empezar teniendo tantas cosas que contar. Lo que ocurre es que no estoy segura de si es que no sé por dónde empezar o es que mi cabeza no está para contar nada.
Dejé estas líneas soñando con las "puertas del Cielo" y vuelvo del Cielo encontrándome con mi realidad diaria... y no encuentro palabras para describir la desesperación que esto me produce.
Hace ya mucho que no me encuentro. No es desacuerdo con lo que tengo, porque entiendo que mi suerte es poder gozar de lo que muchos podrían soñar... a saber... un hijo maravilloso al que adoro, una familia a la que veo poco pero que sé que me quiere, un trabajo ( que no es que sea mi sueño dorado, pero que me permite pagar mis recibos ) en el que sé que se me valora aunque eso no se traduzca en euritos, una casa sin hipoteca, amigos ( de los de verdad, no muchos), y una Fe que, aunque no me sirva de consuelo, es en la que busco la fuerza para no tener que dar un paso atrás ni para coger carrerilla.
Pero el médico dice que es depresión.
Supongo que hay cosas que debo, que necesito cambiar en mi vida, pero que siempre me han parecido tan nímias que ni les he prestado atención. Y ahora se me han venido encima... me las encontré pesándome de sopetón y no sé qué hacer con ellas.

2 comentarios:

SUPERMENDO dijo...

Para mí, lo importante en la vida, no es lo que nos pasa, ni las cosas que tenemos, sino como nos sentimos.

Puedes no tener nada material, y ser feliz, pues nacemos sin nada, que yo sepa, hasta sin ropa, y nadie se lamenta de ello.

Todo el mundo se lamenta de la crisis económica, pero nadie habla de sus crisis interior, es decir, si se siente a gusto consigo mismo.

Si te quieres a ti misma, y no haces mal a nadie, seguro que serás feliz.

Si odias a alguien, te estás odiando a tí mismo.

Así que anímate, que cada día es diferente, unas veces llueve, y otras, sale el Sol.

maile dijo...

Lástima que todo lo que nos pasa nos afecte y nos haga sentir mejor o peor, según se dé.
Lo peor es cuando todos los días son iguales y no hay nada, ni malo ni bueno, que te saque de lo de siempre y haga que el sol de todos los días parezca que brilla más.
Pero gracias por intentarlo y por pasar por esta casa.