Aun puedo oír el eco de los últimos cohetes… esos que me mantendrán unida al recuerdo durante un año más y que serán los que iluminen todos los caminos que haya de recorrer aun cuando las esperanzas me abandonen.
Regresar del paraíso no debería ser tortura para el mortal que desespera.
Cuna donde descansar tranquilo… nana que ayuda cuando al alma tiembla… brazos de Madre que te protegen… sonrisa que es regalada… paz que te hipoteca la vida…
Nada fácil de explicar sin caer en el tópico, o en lo típico. Nada que no suene ridículo, petulante, increíble, o demasiado divino para ser verdad, aunque la verdad… la Verdad… esté ahí.
He regresado a la fuerza. Me han hecho regresar, hacer camino de vuelta. Mi alma se quedo allí y he de darle tiempo para que regrese.
Todos los años lo mismo. Que es mas el dolor de tener que regresar que el de esperar un año mas para volver.
Y no espero que nadie lo entienda. Me da igual.
Mis dias vuelven a empezar su cuenta atrás y serán, siempre, días de dulce agonía.
6 comentarios:
Me alegro que hayas disfrutado de este Rocío hasta el último segundo, como lo cuentas el tuyo tiene que ser muy especial, mi amigo Sema, el Blog del Huertero ha hecho una entrada muy emotiva del "Suyo" lo tengo enlazado, feliz regreso, un saludo
Ya era hora de que volvieses, no?.
Saludos.
No he ido nunca al Rocío. Pero algo debe tener aquello porque los que sois rocieros habláis maravillas de aquello y del camino.
Señor MAME... se oye entre los rocieros que "no hay dos rocios iguales" y que todos son especiales, y recordados, por algo.
Cualquiera que se sienta rociero de corazon se mostrara emotivo al narrar su experiencias alli.
Lei la entrada de Sema. Muy buena, si señor.
Saludos y gracias.
PEDRO... ¿como que ya era hora?. No ha sido tanto tiempo, solamente once dias de nada.
Por mi me hubiera quedado "pa toa la via". Y que conste que aun no he vuelto del todo... parte de mi se queda.
Saludos cielo.
Señor ARO, llevo años caminando hasta el Rocio (nunca tantos como quisiera), y tambien hace años que deje de preguntarme que es lo que tiene aquello.
Ha habido caminos dolorosos, caminos llenos de paz, caminos de descubrimientos o de desilusion, de recuerdos, de amigos... de estancias tristes, solitarias, de sacrificio, de promesas pagadas por anticipado... de gloria, de remordimientos... Todo aflora alli.
VerLa en la calle, sintiendo que me mira y me sonrie, es la medicina para mis males.
Pero claro, para sentirlo, o comprobar si lo sientes o no, hay que ir. Intentelo alguna vez si tiene Fe. Le merecera la pena.
Besos señor ARO.
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