Cuarto y último día de unas vacaciones, las primeras en 20 años, un tanto raras. Raras porque si que me hallo extraña sin trabajar y porque llevando con ellas programadas, y pagadas, más de un mes, he tenido que concertarlas con mis jefes y con el médico porque tuve la mala pata de enfermar dos semanas antes y estoy de baja.
Aún así todos nos comportamos... ellos no pusieron pegas porque iban a ser un remanso de tranquilidad y yo anulé todo lo divertido. Nadar con tiburones, clases de surf o manejar un catamarán. La disco olvidada y todo lo que suponga aventura también. Vamos, que con el Inserso me hubiera movido más.
Pero tampoco tiene nada de malo el arte de no hacer nada mas trabajoso que levantar una tónica detrás de otra, al borde de una piscina en un hotel que te mueres, y disfrutando de las vistas... cuerpos serranos la mayoria que hoy son casi transparentes y mañana te duelen cuando ves el color asalmonetado dolorido que han pillado por un ansia desmesurada de sol en el primer día y, eso si, todos hablando en extranjero.
Pobres. .. mi madre se volvería loca cubriéndolos de paños con vinagre para que no doliera tanto.
En fin... vacaciones relajantes al sol de una Mallorca muy distinta de la que conocí hace más de treinta años, un par de sugerentes invitaciones y tiradas de tejos, ninguna femenina, acompañadas de las consiguientes charlas con mi inglés algo oxidado, y mi ''niña Elena'' dos calles más abajo.
Después de todo no han sido tan malas.
ALFOMBRA DE SAL EN NAVIDAD
Hace 2 horas
2 comentarios:
Pues a disfrutar(las), merecidas si que son...después de tantos años. Besos
Gracias Laura.
Vacaciones "kitkat" de cuatro días porque lo demás es "baja laboral", pero a pesar de todo, ya te digo, no ha estado mal intentar desconectar, y digo intentar porque de vacaciones y pedí pestada la cocina de un restaurante amigo un ratito y poder guisar para mi niña Elena algo que le gusta mucho mucho y que tenía empeño en volver a comer.
Es que no tengo arreglo...
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